jueves, 3 de diciembre de 2009

La Poeta

La poeta no escribe hace rato
¿Qué le estará pasando?
Le faltará inspiración
O su imaginación desapareció

-Princesa ¿Qué tienes?-
Pregunta el polichinela
Protagonizando una comedia
Con flores y azucenas,
Con ternura y sarcasmo

La poeta está sollozando
Le duele el corazón
Se partió en pedazos
Como porcelana por desilusión.

-Muñeca ¿Qué te sucede?-
Cuestiona el payaso
Con su rostro pintado
Y una tarta en su mano
El no entiende que genera miedo

Pobre niñita mimada,
Caprichosa y enamorada
Triste princesa
En su mundo oscuro
Sin nada de color rosa

Sin libélulas que revoloteen,
Sin quien le narré un cuento,
Sin mariposas en el estomago,
Ni cosquillas, ni sonrisas

-¿Qué te falta poeta?-
Dice el pavo real
Quien le regala una pluma
Un pergamino de sueños
Y un canto de aliento

Ella sigue en su universo
Sin dulce de leche,
Sin galletas de miel
Sin poemas de amor
Ni risas, ni juegos

Ya no tiene unicornio,
Ni Pegaso, ni marionetas
Ya las rosas no florecen
Ni el alba despunta

-¡Pequeña preciosa!-
Aclama su hada
Con una varita rota
Deja la luz apagada

Que tendrá la poeta,
La princesa, la muñeca
Se pasaba la tarde suspirando
Transcurría la noche soñando
Y ahora solo gime, solo llora

-Ya no escribe la poeta-
Se grita en la ciudad de los versos
-No escribe ya en las paredes
No canta, no salta
Ni corre, ni siquiera se levanta-

El ajedrez está empolvado
Los reinos y guerreros olvidados
El final del cuento viene
Sin reparar un segundo

Tal vez la poeta, princesa, muñeca

Ha perdido su todo
O quizás su nada
Ha cerrado sus ojos

Con una bella lágrima

Esperanza

Todo está oscuro, no encuentro lo que busco; Grito y nadie responde, pregunto y ocurre lo mismo, me rio y todos se burlan… y si lloro ¿Quién llorará conmigo?

Transcurre la madrugada, caótica, lúgubre, todo callado y no sé que espero aún, veo todavía la luna carmesí, pero nada más le acompaña, similar a mi, estoy aquí tan solo pensando en alguien -¿En quién?- ni yo misma lo sé.

Está amaneciendo, ¿He pasado tanto tiempo en vela?, pero vale la pena contemplar las estrellas de la aurora, esas que se convierten en deseos con tan solo verlas.

Tal vez así descubra que busco, que espero…
Y en quien pienso

Es 29 de Octubre...

Es 29 de Octubre de 2009, deben ser las 10.00 a.m., creo que ha llegado el maestro de Educación religiosa, saca la Biblia de su viejo maletín de cuero y empieza a leer. Mientras tanto mis neuronas de pudren entre postulados de filosofía, algunos verbos en ingles, quizás algo de geometría analítica, son como juego macabros, provocativos, incesantes y algunas voces de niños muertos me atormentan.

De nuevo la risa burlesca de mi padre retumba más allá de las paredes de mi mente, tal vez no rio ni lloro. Pero vivo inmersa en un caos silencioso, que perturba y recorre mi cuerpo, se congelan mis nervios sin yo sentir frio. Ojalá se detuviese el tiempo como en ese momento dejó de circular por mi cuerpo la sangre, mi propio corazón esta convertido en piedra.

Después de tanto esculcar, encontré una navaja plateada y afilada dentro de los cajones que contienen mis pensamientos, debe estar allí desde el día en que traté de suicidarme al rasgar toda idea de revolución, todo conocimiento y carácter concebido para volver a ser la niñita dócil y tonta de antes. Pero ahora tengo miedo y veo mis manos manchadas de rojo, de un líquido carmesí, siento como este arde sobre mis venas.

Echo una mirada al salón de clases, hay heridas pero no en mi cuerpo, ya no hay nadie, nadie vivo…

***Debí haberlo publicado antes, por fin estoy de vacaciones, le dedicaré tiempo al Blog Saludos