El Piano toca de fondo
Y comienzo a escribir
Tomo el lápiz
Hace mucho que no escribo
Es como tomar mi corazón
Entre mis manos llenas de tinta.
Es degustar
Desde la primera letra
Hasta el punto final
Que lo ponen tus ojos,
Es perderme
En un laberinto de versos
Y volar sobre las nubes
Con cada beso que me das.
Escribir es respirar, vivir,
Es decirte
Que no soy nada ni nadie
Sin la música de tus palabras.
Escribir es sentir sobre mi piel de espuma
Los pasos del caminante
En la arena de la playa,
Es tomar de la mano a un niño
E intentar enseñarle
El arte de vivir.
Escribir es enamorarme
De lo que pienso y anhelo,
Es nunca desamarrar la cuerda
Que permite elevar la cometa
Donde reposan mis deseos.
El piano toca de fondo
Y comienzo a escribir
Como si jugara
Entre la fina capa del tiempo
Que se extiende sobre el lienzo
Azul y frio de mi cielo
Donde pinto una a una las estrellas.
Tomar mi corazón
Con las palmas impregnadas de tinta
Es llenarme la boca de magia
Y lanzar hechizos a los enamorados,
Pero ante todo,
Es guardar en cada frase
Un trozo de mi ser.
Para mí, escribir es
Atar mi cuerpo a la brisa,
Coquetearle a la luna,
Danzar con las flores en verano,
Es sonreír y dejarme desprender
Y caer de los brazos de un árbol en otoño.
Tomar papel y pluma
Es besar cada palabra,
Hacerla mía,
Enredarla
En lo único que me pertenece:
Mi esencia.
Donde tejeré
Líneas de pentagramas
Que serán asilo
De rimas y figuras.
Escribir
Es luchar contra mis demonios,
Contra el veneno del mundo,
Contra lo que no debería existir.
Es dar todo de mí
Para no rendirme
Para izar la bandera del amor
En lo alto de la torre de mis miedos,
Donde a veces duermo,
Donde me dejo caer y lloro.
Es aquel recinto
Donde habita lo que mas temo
La desgraciada frase “No puedo”
Escribir es iluminar dicho castillo,
Para que nada dañe
Lo que aún conservo de tu recuerdo.
Porque lo único que deseo
Es que la música, la poesía y la fuerza
Nunca dejen de circular
Por mis manos,
Para abrazar con firmeza
Lo que me deja escribir,
Plasmar cada símbolo que lees…
Para que tú en tu frialdad
Permitas que mis versos te hagan sonreír,
Para que mi imagen no escape de tu memoria.
Simplemente, para que nos encontremos
Como antes:
Escribiendo.
Lanzando frases al viento,
Soñando que algún día
En alguna parte del mundo
Alguien como nosotros
Nos esperara.